Es obvio que a fecha de hoy los representantes de estudiantes son una pieza más de la maquinaria UNED, y trabajan más para perpetuar el modelo actual que para transformarlo. Por otro lado, siempre es mejor tener un representante que no tenerlo, sin embargo, con el reglamento actual en más de 35 centros se han quedado sin representación al no obtener ningún candidato al menos el 3% del censo, o 10 votos.